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Cómo fregar una sartén de hierro fundido

Cómo fregar una sartén de hierro fundido

Lavar una sartén de hierro fundido: guía paso a paso para que duren más tiempo.

Preservar tus utensilios de cocina, en particular una sartén de hierro fundido, es crucial para alargar su vida útil y optimizar su desempeño en la cocina. Aunque el proceso de limpieza de una sartén de hierro fundido puede parecer complejo, seguir algunos pasos sencillos puede garantizar que siga siendo una compañera imprescindible en la cocina por muchos años. Aquí te presentamos una guía detallada para fregar tu sartén de hierro fundido de manera efectiva.

 

Utiliza agua caliente inmediatamente

Después de usar tu sartén de hierro fundido, vierte agua caliente en ella de inmediato. Llénala hasta la mitad con el agua más caliente que puedas tolerar. Este paso facilitará la eliminación de los restos de comida más tarde. En lugar de llevar la sartén al fregadero, déjala reposar sobre la placa.

 

Vierte el agua con cuidado

Para evitar derrames innecesarios, vierte el agua en la sartén utilizando un vaso en lugar de llevarla al grifo. Este método simplifica mucho el proceso de limpieza.

 

Elimina el exceso de comida

Utiliza un estropajo de cobre o un cepillo de cerdas rígidas para eliminar los residuos de comida. Sujeta la sartén con una manopla de horno en la mano menos hábil y utiliza la otra mano para limpiar los restos de comida. Una vez que la sartén esté limpia, vierte el agua en el fregadero.

 

Evita el uso de detergente o estropajo de acero

Para preservar el revestimiento de la sartén, evita el uso de detergentes o estropajos de acero. Si el agua está muy caliente, utiliza un cepillo de mango largo o sujeta la esponja con unas pinzas para proteger tus manos. Recomendamos el uso de nuestro estropajo de cobre, suave pero eficaz, junto con nuestro lavavajillas con Lemongrass Nº400 para una limpieza óptima.

 

Seca la sartén adecuadamente

Coloca la sartén en la vitrocerámica a fuego muy bajo durante unos minutos para secarla por completo. Retírala del fuego y asegúrate de eliminar cualquier rastro de agua o humedad para evitar la oxidación.

 

Aplica aceite de oliva para mantener la sartén

Después de secarla, aplica aceite de oliva sobre la sartén utilizando un papel absorbente. Esto ayudará a mantenerla en óptimas condiciones. Vierte una cucharada de aceite de oliva en la sartén y frótala con un papel absorbente para cubrir toda la superficie de cocción. Realiza movimientos circulares para pulir el hierro con el aceite. Deja que el aceite se absorba durante 20 a 30 minutos antes de guardar la sartén.

 

Siguiendo estos simples pasos, podrás conservar tu sartén de hierro fundido en excelentes condiciones y disfrutar de su uso en la cocina durante mucho tiempo. Recuerda que el cuidado regular es fundamental para preservar la calidad y el rendimiento de tus utensilios de cocina preferidos.

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